¿Te has preguntado qué significa realmente tener un bajo peso a los 18 años? El peso es un aspecto importante de la salud, especialmente durante la adolescencia. En este artículo exploraremos qué se considera bajo peso para un joven de 18 años y cómo afecta su salud y bienestar general. Acompáñanos en este viaje para comprender la importancia de mantener un peso saludable durante la juventud.
En el umbral de la edad adulta, los jóvenes de 18 años miran hacia el futuro con entusiasmo y algo de miedo. Este año de vida trae consigo muchos eventos y decisiones que cambian la vida, como por ejemplo: B. graduarse de la escuela, mudarse de casa y decidir dónde trabajar o estudiar. Para afrontar con confianza estos importantes cambios en la vida, los jóvenes de dieciocho años también deben centrarse en su salud. Como herramienta comúnmente utilizada para evaluar la salud, los adolescentes suelen considerar su estado de peso. Algunos se preguntarán: ¿qué es el bajo peso para una persona de dieciocho años?
La clasificación del bajo peso en un joven de 18 años se realiza utilizando una tabla de crecimiento IMC-edad basada en la edad, el sexo, la altura y el peso. Se considera que un adolescente tiene bajo peso si su IMC cae por debajo del percentil 5.
Por ejemplo, una chica de 18 años que mide 64 pulgadas (5 pies 4 pulgadas o 162 cm) de altura y pesa menos de 102 libras (46 kg) se consideraría con bajo peso. Un joven de 18 años que mide 69 pulgadas (5 pies y 9 pulgadas o 175 cm) se consideraría con bajo peso si pesa menos de 119 libras (54 kg). Puede utilizar una calculadora de IMC en línea en este sitio web: https://www.cdc.gov/healthyweight/bmi/calculator.html.
Esta medición es sólo una de las muchas herramientas utilizadas para determinar el estado de salud de un adolescente. El IMC no tiene en cuenta muchos factores importantes, como la composición corporal, la genética y otras afecciones médicas. Un adolescente con bajo peso suele experimentar otros síntomas de desnutrición. Los adolescentes o padres con problemas de peso deben hablar con un médico.
Continúe leyendo para obtener más información sobre los síntomas, las causas y las formas de aumentar de peso.
¿Cómo sé si mi adolescente de 18 años tiene bajo peso?
Debe consultar con el pediatra o médico de su hijo en un examen físico anual y verificar dónde se registra el peso en una tabla de crecimiento. El médico debe informarle sobre su estado ponderal, ya sea bajo peso, peso normal, sobrepeso u obesidad. Recuerde que los períodos de crecimiento acelerado afectan a cada persona de manera diferente y que los adolescentes a veces aumentan de peso como preparación para la altura. crecimiento Tendencias son más importantes que un solo punto en una tabla de crecimiento.
También puede utilizar una calculadora de IMC en línea para estimar el estado de peso. Teniendo en cuenta la edad, el sexo, el peso y la altura, puede utilizar una calculadora de IMC online en este sitio web: https://www.cdc.gov/healthyweight/bmi/calculator.html.
Utilice las tablas de crecimiento y la calculadora de IMC de los CDC para determinar: Chica de 18 años, 64 pulgadas de alto. (162 cm) se consideraría Bajo peso menos de 102 libras (46 kg). Un chico de 18 años con una altura de 69 pulgadas. (175 cm) sería considerado Bajo peso menos de 119 libras (54 kg).
¿Por qué mi hijo de 18 años? oh¿Tienes bajo peso?
El bajo peso puede tener varias causas. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el bajo peso se debe a un desequilibrio energético en los adolescentes. no cumplen con los requisitos energéticos. En otras palabras, el ingreso de energía no se corresponde con la producción de energía, lo que resulta en una baja disponibilidad de energía. Sin suficiente energía, el cuerpo no puede crecer ni desarrollarse adecuadamente.
Equilibrio energético | = | Afluencia de energía | – | Producción de energía |
ingesta de calorías | Energía utilizada para el descanso, la actividad física, la digestión y otros movimientos. |
La ecuación contable simplifica este concepto. Balance energético = entrada de energía – salida de energía. El aporte de energía se refiere a la ingesta de calorías y la producción de energía se refiere a la tasa metabólica en reposo (energía utilizada en reposo), la actividad física (ejercicio, caminar y otros grandes movimientos), el efecto termogénico de los alimentos (energía utilizada para digerir los alimentos) y la termogénesis fuera de la actividad física. (pequeños movimientos como inquietud).
Los trastornos alimentarios, las dietas, los caprichos a la hora de comer, las restricciones dietéticas, la malabsorción y el dolor digestivo pueden provocar una ingesta inadecuada de energía. El aumento de la actividad física, una obsesión poco saludable por quemar calorías y las afecciones médicas que aumentan el gasto de energía ponen al adolescente en riesgo de sufrir un gasto energético excesivo.
Cualquiera de estos factores o una combinación de ellos contribuyen a la mala disponibilidad de energía. Cuando la ingesta de energía cae por debajo de la producción de energía, el cuerpo no recibe la energía que necesita para crecer y desarrollarse adecuadamente.
Ver también:
¿Debería preocuparse un adolescente por tener bajo peso?
Un experto médico considerará algo más que una simple medición del peso para determinar el estado de salud. Sin embargo, el bajo peso que cae en la clasificación de «bajo peso» suele ser un signo de desnutrición u otra condición de salud y debe tratarse. Un cuerpo desnutrido no puede satisfacer todas las exigencias de la vida diaria. En cambio, centra la energía disponible en la supervivencia, lo que significa que otras áreas de la salud sufren.
La siguiente lista describe algunas de las consecuencias negativas que podría enfrentar un adolescente con bajo peso.:
- Deficiencias de vitaminas y minerales.
- Amenorrea (ausencia de menstruación)
- Baja densidad mineral ósea
- Piel, cabello y uñas quebradizas
- Crecimiento y desarrollo atrofiados
- Lástima por el esfuerzo
- irritabilidad
- Intolerancia al frío
- mente nublada
- Sistema inmunológico deteriorado
- pérdida de peso
- fatiga
- Problemas digestivos
- Disminución de la salud de los órganos.
Si su cuerpo no obtiene la energía y los nutrientes que necesita, eventualmente dejará de funcionar. La desnutrición crónica (a largo plazo) puede incluso provocar la muerte cuando los sistemas vitales del cuerpo se apagan.
Consejos para ganar peso para jóvenes de 18 años con bajo peso
Aumentar la ingesta de calorías en la dieta y disminuir la actividad física ajusta la ecuación energética para favorecer el aumento de peso. Otras opciones de estilo de vida también pueden contribuir a los objetivos de peso, como dormir lo suficiente, controlar el estrés, abordar las barreras psicológicas y tratar problemas de salud subyacentes.
Nutrición
Los adolescentes con bajo peso deben aumentar su ingesta de calorías para lograr un aumento de peso. Si bien esta práctica parece sencilla al principio, los obstáculos físicos y mentales dificultan el aumento de peso. A muchos adolescentes les resultará útil reunirse con un dietista, terapeuta o profesional de la salud registrado durante este viaje.
Algunos adolescentes obtienen la mayoría de sus calorías de alimentos bajos en nutrientes a medida que aumentan de peso. Sin embargo, cantidades excesivas de alimentos ricos en nutrientes, como postres, patatas fritas y refrescos, no mejoran la salud a pesar del aumento de peso. Incluso con una ingesta adecuada de calorías, una persona aún puede experimentar desnutrición si a los alimentos les faltan nutrientes importantes. Los adolescentes deben seguir centrándose en el equilibrio, la variedad y la inclusión de alimentos ricos en nutrientes para establecer hábitos alimentarios que promuevan la salud y el peso.
En particular, el uso de grasas más saludables en las comidas puede aumentar el contenido de calorías, vitaminas, minerales y antioxidantes. Este tipo de grasas se encuentran en aceites vegetales, nueces, mantequillas de nueces, semillas, aguacates, aceitunas y mariscos.
Continúe comiendo frutas y verduras ya que son una fuente importante de nutrientes y fibra, pero mantenga el equilibrio dejando espacio para alimentos con mayor contenido calórico. Asar verduras con aceite de oliva, derretir queso sobre verduras cocidas, mojar frutas/verduras en aderezos o salsas y agregar mantequillas de nueces a las frutas cortadas aumentará el contenido calórico de sus frutas y verduras favoritas.
Como componente básico del cuerpo, los adolescentes con objetivos de aumento de peso deben asegurarse de consumir suficientes proteínas. Cuando se trata de carnes, mariscos y productos lácteos, trate de elegir opciones con mayor contenido de grasa. Las proteínas de origen vegetal, como las nueces y las semillas, también proporcionan grasas insaturadas y saludables para el corazón. Otros buenos alimentos ricos en proteínas incluyen las legumbres (frijoles, soja, lentejas), requesón y huevos.
Los cereales proporcionan carbohidratos que aumentan la energía y los adolescentes siempre deben incluir alimentos ricos en carbohidratos en su rutina diaria. Los cereales integrales ofrecen más nutrientes que los cereales refinados, pero ambos pueden encontrar su lugar en una dieta equilibrada. Trate de limitar el consumo de mucha azúcar.
Por supuesto, no tenga miedo de probar alimentos nuevos, romper las viejas reglas alimentarias y disfrutar de refrigerios y golosinas. Equilibrio significa evitar restricciones y practicar la moderación permitiendo el placer de la comida.
Para quienes tienen dificultades para ganar peso, los batidos y otros líquidos son una forma rápida y sencilla de agregar calorías. Aunque es mejor centrarse en el aumento de peso a través de los alimentos, los suplementos como Garantiza y Boost pueden resultar útiles. Comer con más frecuencia, con al menos tres comidas y dos o tres refrigerios, le permitirá comer comidas más pequeñas y manejables.
Finalmente, si la cantidad de comida que necesita para ganar peso le parece abrumadora, intente agregar calorías mediante el powerpacking. Envasar energía significa utilizar alimentos con mayor contenido calórico pero en menor cantidad para aumentar el contenido calórico o la calidad nutricional de las comidas. Ejemplos incluyen:
- Cocinar alimentos con aceite adicional
- Derretir queso sobre huevos, verduras y sándwiches.
- Mantequilla de nueces con batidos, frutas y productos horneados.
- Espolvoree semillas de chía, lino o cáñamo sobre ensaladas y muesli tibio
Para más ideas, consulte https://intermountainhealthcare.org/ckr-ext/Dcmnt?ncid=529719016
Actividad física
Es posible que algunos adolescentes no puedan satisfacer las necesidades energéticas de su actividad física actual. Los adolescentes que reducen el tiempo y la intensidad del ejercicio pueden experimentar el aumento de peso deseado. Incluso cambiar de ejercicio cardiovascular a ejercicio más impactante o centrado en la flexibilidad puede contribuir al aumento de peso.
Otros necesitan evitar por completo la actividad física adicional para volver a un peso saludable. Además, es posible que algunos signos y síntomas vitales no vuelvan a la normalidad a pesar del aumento de peso sin detener por completo el ejercicio. Las circunstancias únicas de cada adolescente resaltan la importancia de buscar asesoramiento de expertos.
Ayuda profesional
Los problemas de peso generalmente van acompañados de otros problemas físicos, mentales y emocionales. Centrarse únicamente en el componente calórico del aumento de peso reduce la probabilidad de obtener resultados duraderos. Un enfoque holístico en el que el adolescente reciba el apoyo mental, emocional y físico necesario lo encaminará hacia el éxito. Los padres y adolescentes deben buscar el apoyo de profesionales autorizados en su proceso de aumento de peso.
¿Tener bajo peso significa que un adolescente tiene un trastorno alimentario?
Como causa común de anomalías de peso, los adolescentes y los padres deben considerar la posibilidad de un trastorno alimentario con un IMC bajo de peso. Por otro lado, es posible que algunas personas con bajo peso no tengan un trastorno alimentario. Otras causas de bajo peso pueden incluir una enfermedad o afección médica no diagnosticada, caprichos alimentarios, trastornos alimentarios (no un verdadero trastorno alimentario), hábitos de ejercicio o genética.
Además, los trastornos alimentarios afectan a adolescentes de todos los tamaños, géneros y razas. Un adolescente con un cuerpo más grande puede tener la misma probabilidad de sufrir un trastorno alimentario que un adolescente con un cuerpo más pequeño. Un trastorno alimentario es un problema grave. En lugar de utilizar el peso únicamente como criterio para buscar ayuda, los padres y los adolescentes deberían buscar otros comportamientos y síntomas preocupantes.
Signos de un trastorno alimentario:
- Fluctuaciones significativas de peso hacia arriba o hacia abajo.
- Normas alimentarias estrictas
- Secreto al comer
- poca energía
- Insomnio o falta de sueño
- Niebla del cerebro
- Mayor irritabilidad
- Cabello, piel y uñas secos o quebradizos.
- Ausencia de menstruación (amenorrea)
- Mentalidad restrictiva
- Preocupación por la comida
- Desintoxicación (vómitos, ejercicio, laxantes)
- Comer grandes cantidades de comida a la vez.
La Asociación Nacional de Trastornos de la Alimentación (NEDA) ofrece una herramienta de detección, una línea directa y otros recursos. https://www.nationaleatingdisorders.org.
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¿Qué es el bajo peso para un joven de 18 años?
Cuando se habla de bajo peso en un joven de 18 años, se hace referencia a un índice de masa corporal (IMC) por debajo de lo considerado saludable para su edad y estatura. El IMC es una medida que se utiliza para determinar si una persona tiene un peso saludable en relación con su altura. Para los jóvenes de 18 años, el IMC adecuado se encuentra entre 18.5 y 24.9.
Preguntas frecuentes sobre el bajo peso en jóvenes de 18 años
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¿Cuáles son las posibles causas del bajo peso en jóvenes de 18 años?
El bajo peso en jóvenes de 18 años puede ser causado por diversos factores, como una alimentación insuficiente, problemas de salud mental como la anorexia o la bulimia, condiciones médicas como la enfermedad celíaca o problemas hormonales.
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¿Cuáles son los riesgos del bajo peso en jóvenes de 18 años?
El bajo peso en jóvenes de 18 años puede llevar a problemas de salud como la debilidad ósea, la falta de energía, problemas de desarrollo y un mayor riesgo de padecer ciertas enfermedades. Es importante buscar ayuda médica si se sospecha que un joven tiene un bajo peso.
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¿Cómo se puede ayudar a un joven de 18 años con bajo peso?
Es fundamental buscar el consejo de un profesional de la salud, como un médico o un nutricionista, para determinar la causa del bajo peso y elaborar un plan de tratamiento adecuado. Esto puede incluir cambios en la dieta, asesoramiento nutricional, terapia y tratamientos médicos, según sea necesario.
En resumen, el bajo peso en jóvenes de 18 años puede tener un impacto significativo en su salud y bienestar. Es importante estar atento a los signos de bajo peso y buscar ayuda profesional si es necesario.